Aprende a conservar las castañas

Ha llegado el otoño y con él uno de los frutos secos con mejor sabor y mayor versatilidad. Estamos hablando de las castañas y os vamos a mostrar como conservarlas para poder utilizarlas durante todo el año.

Propiedades de las castañas

Entre sus muchas propiedades y su gran valor alimenticio, podemos destacar que se trata de un fruto seco bajo en calorías que combate el estreñimiento, por su gran contenido en fibra

Comprar o recolectar castañas

Es muy importante que en cuanto las compres o hayas terminado de recolectar las castañas las guardes en un lugar fresco y seco, preferentemente dentro de una cesta de mimbre o capazo que tenga agujeros por los que penetre el aire, evitando así que se pudran.

Las bolsas de plástico, como habrás deducido, son su peor enemigo ya que no les permite respirar e inician un proceso de putrefacción.

Duración según el tipo de conservación

En esta tabla te mostramos el tiempo de conservación de las castañas según el tipo de conservación.

Método de conservación Tiempo de duración
Castañas en la despensa 15 días.
Castañas congeladas 6 meses.
Castañas en almíbar 3-4 meses.

Con estos datos podrás elegir cuál de los tres métodos es el que prefieres.

Tres métodos de conservación de las castañas

Este fruto, apetece comerlo o preparar sabrosos purés para acompañar nuestros platos en cualquier época del año y, por este motivo hoy te mostramos tres métodos de conservación de las castañas, para poder disfrutarlas fuera de temporada.

Congelación

Aunque pueda parecer extraño, las castañas son un fruto que podemos congelar para conservarlo.

Existen dos maneras de congelar las castañas:

  1. Con piel: para ello podemos ponerlas en un bote de cristal, evitando las bolsas de plástico de congelación.
  2. Sin piel: es un poco más costoso ya que las hemos de pelar en crudo, eliminado la cáscara externa. Una vez peladas se han de poner en remojo en agua muy caliente para poder retirar la segunda piel. Una vez peladas las podemos congelar en tarros de cristal o bolsas de plástico para congelar alimentos.

Al sacarlas del congelador podemos esperar a que se descongelen o bien se pueden asar o utilizar para recetas de cocina, sin descongelarlas.

Envasado al vacío en su jugo

Si prefieres tenerlas guardadas en la despensa y así no tener que utilizar el congelador, este es el método que más te conviene.

Para poder envasarlas al vacío seguiremos estos sencillos pasos:

  • Esterilizar los tarros de cristal que vamos a utilizar
  • Pelarlas, quitando solo la cáscara exterior
  • Hervirlas para poder retirar la segunda piel
  • Una vez peladas, colocarlas en tarros de cristal y rellenarlos con el líquido de la cocción
  • Tapar los tarros con sus tapas metálicas
  • Hervir al baño maría los tarros cubiertos de agua en su totalidad para conseguir el vacío
  • Una vez se enfríen, secar y guardar en la despensa

Cómo verás es un procedimiento sencillo que te permitirá mantener las castañas en perfecto estado durante mucho tiempo.

Por el contrario, este método no te permitirá asarlas como se suelen consumir para la Castanyada o Halloween.

Hidroterapia para conservación

Es posible que no conozcas este método o quizás lo hayas oído o heredado de tus abuelos, ya que es uno de los métodos de conservación más antiguo, que se utiliza para las castañas.

La procedencia de esta técnica se desconoce, pero sí que sabemos que, la utiliza la gente de campo desde tiempo inmemorables.

Te explicamos paso a paso cómo hacerlo:

  • Pondremos las castañas en remojo en agua fría durante tres días
  • El agua la cambiaremos diariamente
  • Retiraremos las castañas que queden flotando, ya que si flotan es que tiene algún bicho o están secas
  • En el caso de que aparezcan burbujas en la superficie querrá decir que podemos sacar las castañas, aunque no hayan pasado los tres días
  • Secaremos las castañas con un paño
  • Una vez secas se colocan encima de un papel de periódico o bien un papel secante
  • Guardarlas con el papel en un lugar fresco y seco, como por ejemplo, un cajón

Con estos sencillos pasos, tendrás las castañas listas y en perfecto estado para utilizarlas cuando más te apetezcan.

Este método tiene dos peculiaridades:

  1. Las castañas se conservan solo por unos días
  2. El sabor y aroma de la castaña se altera levemente

Ahora ya puedes elegir el método de conservación que más se ajuste a tus necesidades según el uso que quieras darle a las castañas fuera de su temporada.